Estoy "jukiá" con los shoppers
Estoy jukiá con los shoppers. Sí, ese manojo de papeles con el que nos atiborran el buzón... ahora me hacen tanta ilusión como cuando solía recibir revistas.
Entre el tiempo que dedico a leer mis libros (en papel porque todavía le tengo manía al formato electrónico), siempre hay un espacio para disfrutar esa especie de catálogo con coloridas y apetitosas imágenes con olor a ahorros; que una vez a la semana son mi reading companion.
El ritual es el siguiente: pongo todos los periodiquitos en la mesa, planto mi taza de café con leche con hielo (I know!), saco mi libreta de apuntes y bolígrafo en mano, comienzo a acariciar las páginas y las gangas que encuentro en cada hoja.
Cierto es que voy a varios supermercados a hacer la compra pero lo hago con una sonrisa de oreja a oreja cuando me imagino que estoy en un challenge de compra y supervivencia por aprovechar al máximo el dinero. Al final, cuando llego a casa estoy feliz con mi frugalidad. Esos 25¢ aquí y ese pesito allá van sumando, mi hucha lo sabe y la recompensa es gratificante.
No compro por comprar pero a veces pareciera que me estoy preparando para un huracán con los Buy One Get One Free pero todo es parte de la estrategia, adelantándome a la próxima compra, despistando el presupuesto y ahorrando dónde y cómo puedo.
A veces pienso que esto es cosa de vieja, o cómo ha cambiado mi perspectiva, pero después veo que tengo dinero extra y se me pasa.
Acompañamiento: “All 4 love” de Color Me Badd.